Los retos del siguiente año.
Hay eventos que marcan a la humanidad por la manera en la que afectan a generaciones enteras de manera inmediata y porque causan una disrupción en el estilo de vida, en las cadenas de producción y ponen en riesgo inmediato a cientos de miles de familias.
La irrupción de la pandemia califica como uno de los eventos cuyos efectos se verán durante muchos años por venir. Sin embargo, hoy estamos en medio del huracán y los efectos inmediatos ha sido profundos sobre todo en las pymes y en las familias que dependen de ellas.
Todavía no estamos del otro lado, pero la entrada del nuevo año siempre tiene un efecto positivo en nuestra mente para analizar la situación y planear el siguiente año habiendo aprendido la primera lección, la flexibilidad y capacidad de adaptación son indispensables para sobrevivir.
Sí al futuro
Es necesario, con miras al inicio del nuevo año, ver dónde estamos y diversas encuestas muestran que los desafíos que en todo el mundo las pymes enfrentan se pueden resumir en la pérdida significativa del número de clientes y la incertidumbre por los intempestivos cierres y restricciones planteadas por los gobiernos.
Pero también hay una coincidencia en que la tecnología, especialmente, las redes ofrecen oportunidades de acercarse a los clientes de siempre o buscar nuevos. La conciencia de muchos consumidores de favorecer el comercio local también ofrece oportunidad de ganarlos como clientes si se sabe llegar a ellos.
La famosa publicidad de boca en boca, hoy es publicidad de red en red, así que hay que estar presente en todas la que se pueda desde el chat de la colonia, hasta las clásicas de IG, FB y TW. En todas ellas hay que señalar con claridad las formas de contacto, de entrega y toda aquella información que dé confianza a los posibles clientes.
Si el perfil de negocio lo permite, se debe procurar la apertura de tienda en línea o aprovechar plataformas digitales, así como establecer diferentes formas de pago para que los clientes ponderen sus opciones y el pago en efectivo no sea una barrera para concretar una venta.
Redes y lazos
La angustia de ser las únicas personas que están sufriendo los efectos de determinada situación generalmente acentúa la percepción de la gravedad de la misma y suele nublar la mente para encontrar opciones. No han sido pocas las veces que simplemente con encontrar a alguien más que está pasando lo mismo que nosotros, nos sentimos mejor casi de inmediato. Incluso antes de conocer cómo ha enfrentado la situación y encontrar algunas ideas suyas que podamos replicar.
Por eso es tan importante que los pequeños empresarios se acerquen para estrechar lazos y beneficiarse de las ideas exitosas de otras.
Las pymes también se beneficiarán si se acercan a grupos e instituciones que otorgan orientación, que facilitan el networking y ayudan incluso para informar y aprovechar esquemas de financiamiento.
A la vez, la tecnología ha acercado oportunidades de colaboración antes no exploradas, hoy con relativa facilidad se pueden hacer sinergias con pymes que estén en otro estado o incluso en otro país.
No se puede pecar de optimista respecto a cómo se vivirá el próximo año, pero tampoco hay que permitir que el pesimismo se vuelva un lastre que impida ver las oportunidades de transformar el negocio, crear lazos y completar los retos que han de venir.