La RSE y la utilidad
Apoyar al círculo que te rodea, evitar problemas sociales y medioambientales, crear una cultura de prevención y no de corrección, son unas de las tantas consecuencias positivas que aporta la Responsabilidad Social Empresarial, sin embargo, estos no parecen suficientes beneficios para algunos empresarios. Tomar conciencia y aportar a la mejora de la sociedad no sólo consiste en dar, también en recibir. Cualquier decisión conlleva a un resultado que puede impactarte de forma positiva o negativa, la RSE genera un cambio positivo a la sociedad y tus stakeholders pero, ¿cómo benefician las acciones socialmente responsables a los empresarios?
Cuando hablamos de utilidad, generalmente el primer significado que recurre a nuestra mente es el uso que podemos darle a algo. Hemos reflexionado anteriormente sobre el impacto que genera la RSE en la sociedad, para qué nos ayuda y cómo podemos ejercerla. En esta ocasión analizaremos cómo repercute en la utilidad realizar acciones socialmente responsables. Antes de comenzar, imagina que la empresa funciona como un engranaje, donde todas las áreas están conectadas y dependen unas de las otras para su correcto funcionamiento, de esta manera también funcionan los beneficios que se generan sí tu empresa es socialmente responsable.
Mayor productividad
El apoyo a tus colaboradores genera una mayor productividad, ya que los haces sentir parte de la empresa y reconoces su labor dentro de la misma. Cuando tenemos un gran índice de productividad, los colaboradores realizan sus tareas con mayor eficacia e incluso felicidad, ¿has escuchado la frase “amo lo que hago”?, busca que tus colaboradores amen el lugar y las tareas que realizan, que se sientan importantes ya que sí ellos no estuvieran desempeñando esa labor, alguna parte de la empresa no funcionaría como ahora lo hace. Al capacitarlos generas capital humano preparado y con herramientas intelectuales para hacer frente a cualquier reto que se les asigne, tienden a generar nuevas ideas para ejecutar sus deberes y hacerlo de una forma más eficaz. Recuerda que debes cuidar a tus colaboradores y así ellos cuidarán de tu negocio.
Credibilidad.
Las generaciones de ahora, buscan algo más allá que satisfacer sus necesidades con el primer producto que les agrade, las cosas han cambiado y cada día los consumidores se preocupan más por adentrarse en el mundo de la empresa, esto quiere decir que se informan sobre las decisiones que cada una toma con respecto al impacto social, económico y medioambiental que el consumir esas marcas puede generar. La credibilidad será uno de los mejores resultados que te dará la Responsabilidad Social, ya que genera un acercamiento y una relación de confianza consumidor – empresa, esto se debe a que el consumidor estará consciente que al adquirir esos productos, está apoyando a la generación de empleos en comunidades, que los residuos de ese producto no generan tanta contaminación o que la empresa apoya a personas en situación de vulnerabilidad con una parte de las ganancias. La RSE también cuida tu imagen y explica a tu mercado quién eres realmente. Cuida siempre tus productos, marketing y procesos, ya que sí en cualquier momento tus acciones contradicen lo que tu comunicación les dice a tus consumidores, la credibilidad se romperá en un breve instante y para tus clientes, te volverás como una de las tantas empresas que por sí solas se han puesto la soga al cuello. En caso contrario, la credibilidad te llevará al siguiente beneficio, el posicionamiento.
Posicionamiento.
El posicionamiento no es nada más que el lugar que ocupas en la mente de tu consumidor. El nivel de preferencia que tienes ante otras marcas y/o productos que ofrecen lo mismo que tu empresa al mercado y esto, se logra a través del marketing y como mencionamos anteriormente, la credibilidad que generas hacia el consumidor. Cuando la empresa se convierte en una de las favoritas en el mercado y sus productos son los más elegidos, se debe al reconocimiento, al amor a la marca y a los pensamientos que el consumidor tiene sobre la misma. Si tu empresa es socialmente responsable, se tiende a crear una simpatía entre el consumidor y esto influye en su decisión de compra. Tener un buen posicionamiento, incrementa las ventas de la empresa, por tanto, la utilidad aumenta.
Sin hablar de temas contables, podemos demostrar que la Responsabilidad Social Empresarial nos aporta muchos más beneficios de los que se pueden ver a simple vista. Los mencionados anteriormente, son la punta del iceberg y podemos encontrar muchos otros, como la creación de nuevas tecnologías que contaminen menos, estas suelen ser una inversión fuerte que genera ahorros a largo plazo o las capacitaciones, cursos o apoyos en obtener grados a tus colaboradores, su conocimiento e ideas, pueden ser compartidas para generar una mejora continua dentro de la empresa. La RSE hará que tu utilidad sea tangible e intangible, pero siempre habrá un retorno que te favorezca.